9 jun 2009

75 años

El Pato Donald festeja 75 años de haber aparecido en la historia de esta industria, el 9 de junio de 1934, con un papel secundario en el cortometraje de dibujos animados "Little wise hen" (Gallinita sabia).


La historia de uno de los míticos personajes de Walt Disneyse basó en una fábula sobre una gallina que busca ayuda cuando intenta reclutar a trabajadores para plantar y cosechar su cultivo de maíz.

125 producciones fílmicas y cortometrajes, muy cerca de los logros alcanzados por los personajes principales de Disney, Mickey y Mimi.


Mientras Disney creó a Mickey como un personaje para atraer a los niños, Donald representó una figura picante con apariencia de adulto y con sueños inesperados y disparatados.


"Donald ha sido un perdedor, pero con un corazón de oro y nunca ha renunciado a sus metas aunque de manera frecuente sea humillado", escribió la compañía Disney al describir al pato de plumas blancas y vestuario de marinero.


Su primer protagónico se dio en 1937 como el trovador Don Donald en un cortometraje realizado en México y en donde aparece con Donna Duck, quien en producciones posteriores fue rebautizada como la romántica "Daisy".


El Pato Donald es uno de los contados personajes animados que cuenta con su estrella en el paseo de la Fama de Hollywood; además, plasmó las huellas de sus patas en cemento fresco afuera del teatro Chino de Hollywood.


Además, este personaje, a quien se le añadieron sus sobrinos Huey, Dewey y Louie, hijos de su hermana Della Duck, ha aparecido en más películas que ni el propio Mickey Mouse.


Así, Donald Duck es conocido en Argentina y México como Pato Donald, en Dinamarca como Anders, en Indonesia como Donald Bebek y en Italia como Paperino. Curiosamente en Alemania es más popular que el propio Mickey Mouse.





La voz original le fue aportada por Clarence "Ducky" Nash quien empleó su gracia y estilo característico durante 50 años y todavía el año pasado apareció rimbombante al lado de Adrianne Bailon, estrella de "Cheeta Girl".

Michelle Obama de París a Londres





Michelle Obama, considerada por los especialistas franceses en moda la primera dama estadounidense mejor vestida desde Jackie Kennedy, consolidó su prestigio durante su viaje a París, con clásicos de diseñadores estadounidenses.

Sin embargo, la mujer que puso a minoristas sin pretensiones como J. Crew en el mapa de la moda también reveló una debilidad por la alta costura francesa, al llevar a sus hijas de compras a la exclusiva tienda para niños Bonpoint.

La visita de la señora Obama a la Ciudad Luz fue promovida como una revancha del "duelo de fascinación" frente a la glamorosa primera dama francesa, la supermodelo y cantante Carla Bruni-Sarkozy.

Las dos aparecieron juntas frente a las cámaras durante la conmemoración del Día D en Normandía, ambas con vestidos notablemente similares, de color blanco cremoso y largo hasta la rodilla, con cinturones contrastantes y zapatos de aguja de tres centímetros y medio.

Los tacones altos fueron una novedad en el vestuario reciente de Bruni-Sarkozy, una italiana piernilarga de 1,75 metros de estatura que desde su casamiento con el presidente francés Nicolas Sarkozy, de baja estatura, prefiere aparecer en público con zapatos sin tacón.

El vestido de Bruni-Sarkozy llevaba la firma de Christian Dior, su preferido. El de la señora Obama era de Narciso Rodríguez, uno de los varios diseñadores estadounidenses que prefiere.

El semanario francés de modas Elle dijo que parecían "mellizas" y elogió su aire "sofisticado, femenino" parecido al tipo de la década de 1950 como "Un éxito: ¡Queremos más!"

El domingo, la primera dama y sus hijas Malia, de 10 años, y Sasha, de siete, fueron de compras a Bonpoint, una tienda de ropa para niños preferida por los parisinos ricos y celebridades como Sofia Coppola.

Bonpoint, en el barrio de clase alta Saint Germain des Pres, estaba cerrado por inventario el lunes y ningún empleado de la tienda quiso revelar qué habían comprado. La marca, conocida por suéteres de cachemira y vestidos color pastel, es algo muy distinto de CrewCuts, la línea infantil de J. Crew, que las niñas vistieron durante la ceremonia de juramentación de su padre.

La señora Obama y las niñas se encontraron con el presidente en París, la última escala de su gira de seis días por el Medio Oriente y Europa. Obama regresó a Washington el domingo, mientras su esposa e hijas siguieron disfrutando el lunes de la capital francesa.

Aparte de las conmemoraciones del Día D, la visita de la señora Obama a París fue privada, cerrada a la prensa. Los fotógrafos y camarógrafos pudieron tomar algunas imágenes de las tres en los monumentos imprescindibles de París como la Torre Eiffel, el museo de Louvre, el Centro Pompidou y la catedral de Notre Dame.

También fueron agasajadas con un almuerzo en el Palacio del Eliseo por los Sarkozy, en algo que pareció un anticipo del cumpleaños de Sasha el próximo miércoles.

No se aclaró cómo vistieron las señoras Obama y Bruni-Sarkozy para el almuerzo, de manera que los observadores de la moda tendrán que aguardar el tercer asalto del enfrentamiento entre las dos.

La primera dama de Estados Unidos Michelle Obama y sus hijas Malia y Sasha, de 10 y 8 años, cenaron el lunes en un pub de Londres, situado cerca de la embajada de Estados Unidos, indicaron testigos el martes.

8 jun 2009

Homenaje Marilyn Monroe

Las estas fotos fueron descubiertas en los archivos de Life, tomadas por el fotógrafo de esta revista. Se las publicaron en su página de web con motivo del aniversario de natalicio de la estrella. Fueron tomadas cuando tenía 24 años, antes de convertirse en una actriz sexi.
Se vistió de blusa de manga larga, en bikini o de faldas cortas.
Posó en diferentes posiciones para presentarse















Buenos Aires por Beatríz Sarlo

"Bueno, el no mirar esa otra ciudad, es también tema del libro, que destaca ese cambio de mirada sobre los inmigrantes, que entre principios del Siglo XX y hoy se ha vuelto sin duda más xenófoba.

Se da por dos razones. La primera es porque la inmigración fue un proyecto nacional, de Estado, desde fines del siglo XIX hasta comienzos del siglo XX. Después, puede que a las elites no le gustaran los inmigrantes que llegaban pero era un proyecto de Estado. Había agentes inmigratorios argentinos en Europa reclutando inmigrantes y esta es la primera gran diferencia. Hoy el Estado no tiene una política sobre los inmigrantes. Lo segundo es que aquellas oleadas de inmigrantes llegaban en un momento en el que había necesidad de fuerza de trabajo. Hoy los inmigrantes llegan a un mercado de trabajo que se esta achicando. Por eso creo que la defensa de la inmigración latinoamericana tiene que ser hecha con la Constitución. Nuestra Constitución dice que nosotros le garantizamos los derechos a todos los que vengan a habitar el suelo argentino. Ese no es un problema de dónde están los migrantes, si es en la 1-11-14, en la Villa de Retiro o en el segundo cordón del Gran Buenos Aires. Ese es un problema nacional. Es el Estado Nacional el que tiene que garantizar esos derechos. Al margen de los prejuicios racistas que aparezcan en la población. La gente no siempre es de lo mejor, más bien uno puede pensar lo contrario. Pero nosotros tenemos pactos constitucionales que cumplir.

Pero hay que incluir en esa discriminación a los pobres en general, no sólo a los extranjeros...

Los "blancos" de Buenos Aires no distinguen entre un migrante de provincias del norte y un extranjero. Y otra vez, tienen que quedar claro que muchos de estos ya no son migrantes, son argentinos, hijos incluso de argentinos. El racismo opera sin importar la nacionalidad, pero el problema es que no hay una política frente a esto y es muy necesaria en tiempos de crisis. Al menos la Argentina no tienen una escuela racista pero tampoco tiene una escuela que les garantice el estudio a estos hijos de inmigrantes como sí lo hizo con las oleadas del Siglo XX, con nosotros. "

SUBURBANOS extracto reportaje publicado por Revista Ñ de Clarín

Tapas